Esta combinación Júpiter-Sol encuentra posibilidades óptimas de realización utilizando dotes de meticulosidad, capacidad organizativa, análisis y síntesis.
Se deja poco a la improvisación; el éxito se construye momento a momento, con lúcida objetividad en cada intento.
No se muestran expansivos, tienen tendencia a retirarse, a desconfiar de personas y situaciones, a menos que la Luna o el ascendente no se encuentren en signos de Fuego o Aire, favoreciendo de esta forma las relaciones y un cierto optimismo.
Resultan personas de gustos difíciles en todos los campos, desde la elección de los amigos a las posibilidades de trabajo, sin excluir las comidas, por lo que entran en crisis si no poseen determinadas características higienistas y nutricionales.
Escorpio-Virgo es siempre una pareja zodiacal que llega al máximo de las posibilidades críticas. Diríamos incluso ácidas.