En el budismo tibetano se utiliza la Astrología y sus interpretaciones como claves útiles que pueden ser utilizadas para nuestro desenvolvimiento persona). Afirma que las posiciones de los cuerpos celestes en un Horóscopo reflejan una porción de los potenciales kármicos con los que nacemos, entendiendo por tales los resultados que podemos obtener a partir de las acciones que realizamos, las cuales dependerán de cómo sepamos aprovechar nuestras capacidades.
De acuerdo con estas ideas, nuestro signo solar indica una suma de características y de posibilidades que nos convendrá conocer, aceptar y validar con nuestros actos, para así alcanzar un estado de paz, rectitud y amor.
A través de nuestro potencial kármico, podremos alcanzar nuestra realización personal y liberarnos, pues ése es el fin concreto para el budismo: que logremos realizarnos y desprendernos de todo aquello que coarta en nuestro desarrollo personal.