La Luna en Leo está en afinidad con la dinámica del Capricornio. Los dos signos son muy orgullosos y por ello a veces serán personas demasiado seguras de sí mismas y esta tendencia aumenta porque son unos ganadores, sobre todo en el campo profesional.
Se unen un carácter extrovertido, extremadamente simpático, con una actitud de firme voluntad.
Se les confiarán fácilmente tareas importantes. Tienden al exhibicionismo, pero por suerte el signo les impide exagerar.
Consideran el amor algo muy hermoso, pero temen perder la independencia con una unión demasiado seria y por ello piensan en el matrimonio en la madurez.
Quien se enamora de ellos no tiene la vida fácil puesto que se escurren de las manos como anguilas.
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