El muro es la representación de las inhibiciones que nos separan de nuestra interioridad. Puede ser positivo soñar que en el muro hay una brecha. Esto es señal de que existe la posibilidad de penetrar, aunque sea con esfuerzo, en la parte más real de nosotros mismos.
El muro, así como la muralla, el foso y la empalizada, puede simbolizar el aislamiento psíquico y la separación de los demás, de la familia y de la sociedad. Por otra parte, puede significar también la protección de los ataques externos.
Soñar con romperse la crisma contra el muro hace prever una inminente migraña.
Freud ve representado en el muro liso al hombre; si tiene protuberancias representa a la mujer, emblema de seguridad. Encaramarse a un muro hace referencia al antiguo gesto del niño que sube a las rodillas de sus padres para encontrar protección.
Jung reconoce en este símbolo una imagen maternal y muy protectora.
La interpretación popular dice que el muro es un obstáculo en la propia existencia. Pero también es seguridad y protección, a excepción de cuando hay paredes demasiado cercanas y asfixiantes: en ese caso el muro es un presagio de fracaso.
Muy positivo es soñar con encaramarse y llegar a lo alto de un muro, porque significa un golpe de fortuna para quien está cosechando fracasos, curación para quien está enfermo, libertad para quien está prisionero.
Respecto a los intérpretes de la Antigüedad, para los egipcios ver demoler un muro libera al soñador de sus propios pecados. Los asirios sostienen que cuando un rayo de luz da sobre un muro orientado al sur morirá el propietario de la casa; si da, en cambio, sobre el muro orientado hacia el norte será la mujer la que muera, y si es sobre el muro interior será la hija. Infausto presagio también para los árabes: los muros son el símbolo del soñador y de los componentes de su familia; sillares que sobresalen anuncian la muerte de uno de los dos cónyuges. Un muro agrietado después de un terremoto habla de peligro para la vida del soñador. Si este sueña con reconstruir el muro abierto significa que tendrá otra mujer. Encontrarse en la cima de un muro es un excelente augurio.