Ver una inundación señala desequilibrios emocionales. Es un aviso que indica la necesidad de asumir el autocontrol e ir dejando de lado aspectos negativos como la ira, la angustia y el pesimismo.
Si nos vemos siendo arrastrados por una inundación, advierte sobre la perniciosa influencia que ejerce sobre nosotros una persona conocida.
Si nos vemos siendo arrastrados por una inundación, advierte sobre la perniciosa influencia que ejerce sobre nosotros una persona conocida.