Géminis Caballo

El geminiano nacido en año gobernado por el Caballo mostrará vitalidad y capacidad de acción fuera de lo común. Su personalidad será fascinante, alegre, incansable en general y comunicará a propios y extraños su alegría de vivir aunque, por otra parte, lo haga de manera bastante alejada de normas, convencionalismos y gusto por la disciplina.
Si debiera establecerse la característica más evidente, más típica de la personalidad del Caballo, no sería un error el afirmar que es la necesidad de independencia; al unirla a la condición geminiana se transforma en necesidad de cambio, de aventura, de movimiento hacia lo deseado.
En efecto, para el geminiano del Caballo no hay nada más importante que la propia libertad. Obligado a seguir reglas que no sean las previamente aprobadas por él (o ella) mismo, se sentirá ahogado casi en seguida y las abandonará al galope. Entre todos los signos del zodíaco chino se señala el Caballo, además, por la precocidad con la que deja a su familia de origen y empieza a trabajar.
Este geminiano es para muchos extraño y mucho más imprevisible que el promedio de los nativos de este signo solar. Y es que, al combinarse con el Caballo, cambia de humor con bastante más frecuencia y rapidez. Su inteligencia siempre es aguda y brillante y sus palabras mantienen el poder de convicción característicos de Géminis, pero por el influjo lunar del Caballo logra evaluar las situaciones y toma decisiones con gran rapidez, lo que le convierte en un habilísimo negociador, diplomático o político.
El geminiano del año del Caballo no sabe ser perseverante, ya que esta carencia le viene impuesta por sus dos signos, pero resulta simpático debido a que se muestra excéntrico, complaciente y bullicioso. El Caballo sabe ser buen amigo.
También hay que señalar otra influencia que viene determinada por la acción de ambos signos: se trata del hecho de que pretenda tener la atención de cuantos se hallen donde él y no tolera que se le contradiga. Con frecuencia llega a mostrarse demasiado susceptible y testarudo. Sus cóleras, además, son a menudo muy aparatosas o espectaculares, aunque de escasa trascendencia. A menudo comprobará que tan fácilmente como se enciende se apaga, por obra de su irrefrenable inconstancia. Así, puede suceder que el Caballo se enamore en un instante y que luego se muestre indiferente con la misma rapidez y facilidad.
El gusto por la aventura y la inconstancia de la que a menudo da prueba, ponen al geminiano del Caballo en una condición particular con respecto a la vida afectiva ya que, si bien por una parte busca una pareja que le dé comprensión y afecto, por la otra le cansan las relaciones duraderas. Un hecho, fácilmente comprobable en los geminianos.

Signo Géminis