Son particularmente propensos a los padecimientos del sistema nervioso, las vías respiratorias y el aparato digestivo, en este orden.
Debe observarse que el ascendente Géminis impone extremos al físico, pues, por un lado le mantiene el aspecto juvenil mucho más largamente que a los demás signos, pero por el otro le induce a un bajo tono que permanece y se agudiza en razón directa con la cantidad de ejercicio que realice el nativo, de manera que si éste es sedentario acabará languideciendo presa de múltiples fallos de su salud, los cuales aisladamente pudieran parecer poco graves, pero al sumarse dan lugar a una condición deplorable que fácilmente desemboca en el colapso.
Debe observarse que el ascendente Géminis impone extremos al físico, pues, por un lado le mantiene el aspecto juvenil mucho más largamente que a los demás signos, pero por el otro le induce a un bajo tono que permanece y se agudiza en razón directa con la cantidad de ejercicio que realice el nativo, de manera que si éste es sedentario acabará languideciendo presa de múltiples fallos de su salud, los cuales aisladamente pudieran parecer poco graves, pero al sumarse dan lugar a una condición deplorable que fácilmente desemboca en el colapso.