Táctica más directa para conquistar a la geminiana

Es una criatura del momento, dinámica, inquieta, que se mueve más por los estímulos de las circunstancias que por principios y convicciones. Hay que dejarle espacio para moverse, para realizar su juego, pues si no se siente segura no brillará y se revelará como una voluntad frágil, inestable, depresiva, e incluso conflictiva.

Emplea magistralmente las palabras para inducir a la gente a actuar como ella desea, aunque con frecuencia la debilidad de su carácter anula su poder de sugestión, llegando a darse el caso de que cuando convence a alguien de hacer algo, ella, simultáneamente, llegue a la conclusión de que no vale la pena intentarlo siquiera.

No hay que hablar nunca de otras mujeres en su presencia, porque no le gusta compartir el escenario. Ésta es una recomendación que debe acatar quien aspire a relacionarse sentimentalmente con ella, pues, al contrario de signos más competitivos, en vez de interesarse por alguien que le plantea obstáculos, preferirá retirarse y mostrarse ya inaccesible, como resentida por la falta de consideración.

Tiene que ser amada por. su naturaleza alegre, vital y por su talento para dar a la existencia un tono o un sabor que día a día es distinto, libre siempre del espectro de la rutina o del aburrimiento.

Hay que reconocer que es más responsable que el varón del mismo signo. Más realista. Más capaz de obrar en previsión de lo que podría sobrevenirle en el futuro.

Sin embargo, es más sugestionable y dependiente y suele permitir que los demás abusen de su escasa dureza de carácter.

Signo Géminis