Arcano 19 El Sol

Topacio imperial y cuarzo rutilado

El alborear de la felicidad

Plano: físico (como el cuarto desdoblamiento del Arcano Raíz La Emperatriz, que significa: el reencuentro con la luz).

Elemento: tierra/tierra (la esencia de las sensaciones).

Función: sensación (de estar vivo).

Palabra: felicidad (de sentirse entero nuevamente).

Imagen: el Sol, la luz, la iluminación, la felicidad, la alegría, la pureza, la inocencia, el niño, Cosme y Damián, el reencuentro, el matrimonio místico, Shiva y Shakti unidos.

Significado: el sol representa el reencuentro consigo mismo, con la propia luz. En la carta, dos niños se encuentran bajo la luz radiante del Sol. Salimos de la noche oscura del alma hacia el Sol. Iluminados como él, volvemos a ser niños nuevamente. Solo los niños tienen la pureza necesaria para admitir y vivenciar la intensidad de la luz espiritual. Un ego adulto sería incapaz de soportar tamaña luz y claridad. Por eso, la carta del Sol es una de las últimas cartas de los Arcanos Mayores. Solamente cuando abandonamos el ego y nos vamos a nuestro interior podemos encontrar, por fin, esa querida criatura perdida.

Mensaje: la sensación de estar vivo es la propia fuente de alegría y felicidad. Nos sentimos como niños nuevamente. A bien con la vida. Unidos a ella en cuerpo y alma. «Si no os hicierais como los niños, no entraréis en el Reino de los Cielos». Solo la claridad y la felicidad del corazón de un niño puede unir los opuestos. Este es el verdadero Matrimonio Místico del ser. Consciente e inconsciente, unidos por amor para generar la propia luz. Amanecemos, nacemos a la vida.

Consejo: use la claridad para iluminar sus caminos. Es hora de brillar. La felicidad está a su alcance, basta con que sonría hacia ella. La pureza de corazón une a todos los seres, sin excepción. El sol está aquí para brillar para donar luz y calor a quien tiene un corazón para amar.

Cautela: pero cuidado para no cegarse con el propio brillo, la vanidad y el orgullo de la propia felicidad acaba alejándola de uno. La felicidad no se guarda, se, ofrece. Si nos quedamos ante el espejo contemplando nuestra belleza, nadie podrá aprovecharla.

Chalcra: la activación del sexto chakra, a partir de la unión del cuarto y el primer chalcras, equilibrando el segundo y el tercero. El despertar del ojo solar a partir de la experiencia de la felicidad.

Cristales: Topacio imperial: alegría y felicidad por la vida, ilumina sus caminos. Cuarzo rutilado: intensifica la luz espiritual, transmitiéndola hacia el interior del material.

El Sol no está hecho para mirarlo, sino para iluminar y mostrar el camino. En una película no miramos hacia el proyector sino hacia el efecto que hace en la tela. Es en la experiencia de las imágenes donde está el sentido de la luz. Al mirar hacia el proyector, hacia el sol, hacia nosotros mismos, nos cegamos con su luz, con nuestra propia luz. Sin embargo, cuando experimentamos el camino, cuando proyectamos nuestra luz en la tela de la vida, el Sol surgirá a nuestras espaldas, dando luz a nuestros pasos y calor a nuestros corazones.