Arcano 2 La Sacerdotisa

El cuarzo rosa y la amatista

La entrega del amor

Plano: astral (el alma como nuestro cuerpo emocional, el inconsciente).

Elemento: agua (principio Yin pasivo).

Función: sentimiento (la capacidad de sentir, dar y recibir afectos).

Palabra: amor (el corazón abierto).

Signos: Cáncer (el lago, el inconsciente personal), Escorpio (el río, el inconsciente transpersonal) y Piscis (el mar, el inconsciente colectivo).

Imagen: el Alma, el Amor, el Sentimiento, la Emoción, el Astral, el Inconsciente, el Sueño, la Imaginación, la Fantasía, la Madre del Universo, María, Isis, Yemanjá, la Virgen, la Esposa del Espíritu, el Mar, la Luna, la Prometida, la Sibila, la Prostituta del Templo, Avalón.

Significado: la Sacerdotisa rige el reino inconsciente del amor, de los sentimientos y de las emociones. Es la propia alma de cada ser. Solo llegamos a ella a través de los sentimientos, de la sabiduría del corazón, de las experiencias inexplicables a nuestro buen sentido y a nuestra razón. Es el misterio del amor incondicional por la vida, pero también el deseo compulsivo de las emociones que el inconsciente nos hace buscar en nombre de la felicidad, De esta manera, muestra la dualidad de la vida, el bien y el mal, el placer y el dolor que viene de la constatación de que el sentimiento siempre exige dos seres para existir.

Mensaje: solamente a través del amor, de la entrega de nuestro ser a los verdaderos sentimientos, llegaremos a la felicidad. El amor no es una conquista sino una donación e intercambio de energía con la vida y con los seres amados. El miedo de amar es el miedo de vivir.

Consejo: Abra su corazón al amor. Acepte y disfrute aquello que la vida le ofrece. Viva todos sus sueños y fantasías. Deje que le guíe su imaginación,

Cautela: pero cuidado, no transforme el amor en el objeto amado. Cuando dependemos de alguien o de alguna cosa para ser felices, perdemos nuestra libertad de acción en la vida. De ahí viene la pasividad y la sumisión al ser amado sin el cual no podemos vivir. También es negativa la incesante búsqueda de la felicidad, la búsqueda del ser amado. El amor no se busca, se encuentra, pues ya está en nosotros mismos. Cuando nos amemos, el amor llamará a nuestra puerta.

Chakra: la sacerdotisa rige el cuarto y el segundo chakra. En el cuarto, rige el amor por la vida, el amor impersonal e igualitario para todos los seres vivos. En el segundo, rige el deseo y la búsqueda inconsciente de la satisfacción emocional en aquello o en aquel que se ama.

Cristales: cuarzo rosa. Es el cristal del amor, del amor que necesita ser sacado a la superficie, sentido y vivido, individualmente, por todos.

Amatista. Es el cristal de la entrega del alma a un sentimiento mayor; de la aceptación incondicional de aquello que la vida nos ofrece.

En el Juego de la Vida, lo racional controla lo emocional y lo emocional descontrola lo racional. ¿Ser o no ser?, he aquí la cuestión. Ser o no ser, he aquí la solución.