Ritual para en contrar nuestra Alma Gemela

Este ritual, como sin duda habrá adivinado, no se dirige a una persona definida y determinada. Esto significa que al igual que no conoce usted ni a Eva ni a Adán, tampoco conoce a la persona que debe ocupar un lugar en su existencia.

Permítanos oponer a ella una vieja fórmula francesa que no está desprovista de encanto: «que nenni».
Este ritual pone en acción las circunstancias que colocarán en su camino a su alma gemela y orienta sus antenas en la buena longitud de onda, de tal manera que no pueda pasar usted a su lado sin darse cuenta.

El alma gemela se encuentra la mayoría de las veces a nuestro lado sin que nos demos cuenta de ello. Este ritual permite sencillamente poner, al que lo practica ,en la buena longitud de onda y pone en acción los elementos necesarios para que se realice un encuentro, incluso aunque éste haya sido diferido durante años.

Este ritual necesita algunos elementos. Efectivamente, esta vez no usará incienso, sino aceites esenciales. Será necesario que se haga con un pequeño quema-perfumes. Pero sepa que el esfuerzo – mínimo – que podrían aportar a esta búsqueda forma igualmente parte integrante del ritual, anclándole más firmemente aun en su decisión.

1) En su quema-perfumes mezclará unas gotas de esencia de melocotón, de abedul, y de opio.
2) Viértala también en una copita hueca.
3) Alrededor de su quema-perfumes disponga tres velas en triángulo. Una de color carne, que se colocará abajo a la derecha, otra de color violeta situado abajo y a la izquierda y por último, una de color blanco, que se colocará arriba, en el vértice del triángulo.
Nuestro consejo: aunque no sean fáciles de encontrar, use siempre velas teñidas en toda su masa, mejor que otras, más corrientes, coloreadas sólo en su superficie. Sería bueno que la vela blanca sea de verdadera cera. Si sus convicciones religiosas se prestan a ello, utilicé para esta necesidad un cirio de iglesia.
4) Este dispositivo deberá encontrarse al fondo de la mesa, cerca del lado opuesto al que usted se encuentra, de manera que pueda colocar su
dispositivo tarológico sin problemas. Efectivamente, este ritual exige un determinado número de cartas, que dispondrán según la forma clásica llamada: Tirada en Cruz.
5) En lo alto, deberá poner la carta de la ESTRELLA, el que representa de algún modo su buena Estrella o Divina Providencia. En el centro, el arcano de la TEMPLANZA. A la izquierda de ésta, el AS de COPAS. A la derecha de la TEMPLANZA, la RUEDA DE LA FORTUNA. Abajo, si es usted un hombre, el EMPERADOR. Si es mujer, la EMPERATRIZ.
6) Ahora, encienda las velas y su quema-perfumes. La luz natural de las llamas constituirá la única iluminación de la habitación. Asimismo, todos sus elementos deben encontrarse al alcance de la mano, prestos para ser utilizados.
7) Adopte una respiración y lenta y profunda, hasta que sienta que le invade la calma.
8) Moje un dedo en la copita y unja su frente, después la raíz de las fosas nasales y el plexo solar.
9) Permanezca unos instantes, con los brazos ligeramente separados del cuerpo, fijándose en la llama de las velas.
10) Después impregne los dedos de su mano derecha con la mezcla de aceites esenciales y proyéctelos sucesivamente hacia los cuatro ángulos de la habitación, marcando una pausa después de cada dirección. Diga en voz alta:
«Las fuerzas del universo atraen hacia mí a aquél o a aquella que me está destinado/a, del Norte – proyecte la loción en esa dirección -, del Sur – lo mismo -, del este – igual -, del oeste – idem – para que yo pueda realizar el designio que se me ha asignado «. Haga una pausa y diga después: «por las fuerzas de la luz que esto se cumpla».
11) Cierre los ojos y eleve las manos hacia el cielo, con las palmas hacia arriba y después recójalas hacia sí mismo como si tirara de un hilo invisible, hasta que sus manos se crucen sobre su pecho.
12) Después de una corta pausa, apague las velas, encienda las luces y guarde su material ritual.
13) Esta operación deberá ser repetida, a partir del primer viernes de Luna creciente, hasta la luna llena siguiente. ¿Porque durante tanto tiempo?. Sencillamente porque se trata de algo importante que exige la movilización de energías extremadamente poderosas.