En este caso la relación es sólo aparentemente difícil. Uno imagina incompatibilidades al ver el carácter de uno y otro, pero en realidad, a poco que se traten demostrarán una naturaleza bastante afín. Y es que la tradición ocultista ha señalado que el medio en que se desenvuelve el espíritu de Cáncer es la arena. Y uno podría imaginar que se trata de una condición sólo relacionable con la tierra, pero no es así, la arena vuela y es feliz retozando en las alturas con el viento geminiano, para luego volver a la playa e introducirse en el caparazón del cangrejo; allí reposarán en la más inspiradora de las intimidades.
Géminis y Cáncer como amigos
Una de las características que más parecen oponerles es la de que Cáncer traduce toda la existencia a sentimientos, en tanto que Géminis la reduce a ideas. De las ideas puede extraerse un común denominador que permita afrontar los problemas de manera práctica, pero semejante ventaja no puede ponerse en práctica con los sentimientos, por lo que el canceriano se ve fácilmente afligido por las amenazas que encuentra en su camino y no dispone de más recurso natural que el de refugiarse en su caparazón y enterrarse en la arena, en tanto que el de Géminis se eleva hasta las alturas que le permitirán ver la totalidad del bosque sin el estorbo de los árboles.
Géminis y Cáncer como amantes
A los cancerianos les fascina el don que posee Géminis para ofrecer ternura. Ya hemos dicho que el órgano sexual de los geminianos es la mente y, ciertamente, saben cómo acariciarla y expresarse en este sentido. Por su parte, al geminiano le inspiran las emotivas demostraciones del canceriano, pero, viento al fin, no le gusta llegar al acaramelamiento y acaba por levantar el vuelo cuando ya no encuentra lo esencial: fantasía, apoyo, energía, inspiración, sorpresa.
Géminis y Cáncer como socios
Ya hemos dicho que el geminiano posee una mejor perspectiva de la realidad y un sentido práctico mucho más acusado que Cáncer, pero se halla muy impedido para hacer que sus conclusiones pasen a ser hechos. Es aquí cuando el socio de Cáncer puede aportar su método, su paciencia, su perseverancia, su sentido de la disciplina y lograr que la fuente de las ideas se transforme en una fuente de ganancias.
Géminis y Cáncer como matrimonio
El concepto de hogar les separa y les une al mismo tiempo debido esencialmente en que para Géminis el hogar es algo capaz de moverse y para Cáncer es inamovible. Géminis es un signo nómada por excelencia, en tanto que Cáncer es el sedentarismo mismo. Sin embargo, cuando logran conjugar las necesidades aéreas de uno y las interioristas del otro, el intercambio de satisfacciones puede ser inagotable y más prometedor de lo que pudiera imaginarse dentro del concepto de matrimonio.